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El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ratificó el lunes su apoyo al Gobierno de Siria ante la eventual intervención de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el país árabe.
Maduro aseguró que el retorno de la estabilidad en el país árabe requiere del mantenimiento de cooperaciones con el presidente sirio Bashar al-Asad y el Ejército de este país árabe.
En este mismo sentido, llamó a la comunidad internacional a reconocer las amenazas que producirán una invasión en Siria bajo la excusa de luchar contra el grupo terrorista EIIL (Daesh en árabe).
“Si Al-Asad es derrocado lo que pasó en París (capital de Francia) sería nada en comparación a todo lo que pasará en el mundo y en especial en Medio Oriente”, expresó el jefe de Estado venezolano.
De acuerdo con Maduro, las víctimas del imperialismo estadounidense y la OTAN son los pueblos árabes que sufren directamente las consecuencias de las luchas en sus países.
El caos que reina en Siria, señaló Maduro, es el mismo que las fuerzas de la derecha pretenden instalar en Venezuela al fomentar la desestabilización interna y la guerra económica e intentar aislar al país internacional para revertir los triunfos de la Revolución Bolivariana.
Además en referencia a los bombardeos de Rusia contra las posiciones de Daesh en Siria, apuntó que entre los países que afirman luchar contra el terrorismo, Rusia lleva a cabo una lucha verdadera contra el terrorismo en Siria
Rusia ataca posiciones del grupo terrorista EIIL (Daesh en árabe) en Siria.
Asimismo informó que el próximo 23 de noviembre se reunirá con su par ruso, Vladimir Putin, a fin de discutir las acciones necesarias para acabar con los grupos terroristas, un lacra que atañe a todo el mundo.
El presidente del país bolivariano hace estas declaraciones mientras Rusia lanza ataques con cazas y misiles de crucero contra los objetivos del Daesh y otras agrupaciones extremistas, hecho que tiene sumamente preocupado a EE.UU. y varios de sus aliados europeos y de la región.
Desde el inicio de la crisis, en marzo de 2011, el Ejército sirio lleva a cabo una lucha sin cuartel contra varios grupos armados que, apoyados por ciertos países regionales y occidentales, entre ellos Arabia Saudí, Turquía y Estados Unidos, buscan derrocar al Gobierno de Al-Asad.
La crisis siria ya se ha cobrado la vida de más de un cuarto de millón de personas, de acuerdo con las estadísticas del opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
Hispantv